Santo Niño de las Suertes
Tú que estas lleno de benignidad y clemencia
escúchame, te lo ruego,
y dame tu santa bendición, compasión y misericordia.
¡Oh Jesús, Niño fuerte y dulce
acoge mi corazón y hazlo tuyo.
Oh Jesús, Niño apacible y bondadoso
sé Tú mi defensa, amparo y fortaleza.
¡Bendita gloria del cielo y tierra!
a tu lado nada he de temer
pues con el fuego de tu amor
se alejan los peligros de mi vida y de mi alma.
¡Piadoso Jesús Mío!
¡Tierno y sagrado dueño!,
Santo niño de las Suertes,
llego a tus plantas humilde a confesar todas mis culpas,
a contarte mis miserias y carencias.
Óyenos piadosamente y concédenos lo que te pedimos,
por los cuidados que te prodigó tu Santísima Madre
(hacer la petición).
¡Qué dichoso me siento postrado aquí de hinojos!
Vengo a verte, mi amado Niño,
vengo a pedirte consuelo en mis dolores,
alivio en mis aflicciones,
solución en mis necesidades.
Levanto mis ojos hacia ti y te veo dulce y risueño,
convidándome a abrirte mi corazón,
a contarte todas mis amarguras.
¿Me oyes querido Niño?
El corazón me dice que sí....
¡Oh Santo Niño de las Suertes!
haz que te ame sin cesar
y sea muy amante de tu Sagrada Eucaristía,
de la Virgen Santísima y del Patriarca San José.
Rezar tres Padrenuestros, tres Avemarías y tres Glorias.
Hacer tres días seguidos.
No hay comentarios